El tomar agua purificada además de dar beneficio a tu bolsillo, ya que es más barata conseguirla con aquellas que cuentan con precio de equipos de osmosis inversa, también reduce tu consumo de cloro para contrarrestar los microorganismos peligrosos como las bacterias, se agrega cloro al agua durante el proceso de tratamiento del agua, proporcionando una protección impenetrable contra los gérmenes. Puede estar seguro de que el agua del grifo está libre de desinfectantes peligrosos, bacterias E. Coli y quistes si toma agua purificada. Por nombrar algunos síntomas, estos parásitos pueden causar diarrea, dolores de estómago, náuseas, vómitos y fiebre. Los purificadores de agua modernos pueden eliminar con éxito niveles considerables de metales y compuestos que se encuentran en el agua potable sin tratar, como zinc, plomo y mercurio. Estos microorganismos y metales son especialmente peligrosos para los niños. Por ello, si tienes niños en casa, no debes correr riesgos.
Los purificadores de agua son una alternativa más respetuosa con el medio ambiente que el agua embotellada y que es extraída con bombas para agua. Cada año, las botellas de plástico que transportan “agua limpia” terminan en vertederos cada año. Además, las emisiones de carbono producidas al transportar las botellas por todo el mundo son asombrosas. Así que esté agradecido la próxima vez que pueda evitar comprar una botella de agua purificada ya que tiene su propia agua purificada con usted.
Tanto el agua purificada como la filtrada se someten a filtración. Pero el primero pasa por más métodos de tratamiento como la destilación o la ósmosis inversa. El agua purificada es más confiable que el agua filtrada por esa razón que asegura más del 99% de eliminación de impurezas sin importar cuál sea la fuente de agua.
